
Para los que
quiera tener una hierba de primera calidad, con una buena potencia y un sabor
agradable. La hierba recién cortada debe pasar por un largo proceso para
desarrollar todo su potencial.
Sabías que ¿Tu hierba no muere en cuanto
se corta?
Mientras queden restos de humedad
dentro de los tejidos se siguen sucediendo reacciones químicas que influyen de
forma determinante en la calidad y sabor del producto final. Si te estás
fumando la hierba antes de un mes después de cortarla, eres un impaciente. Espera un mes más y será mucho mejor. Al
menos, deja que los mejores cogollos de cada planta se sequen y curen bien.
Para los que no les gusta esperar, fúmate los cogollos bajos y pequeños.
Hay que tener muy presente que son
necesarios dos procesos para tener una buena Cannabis.
1) Secado de la planta: Para cortar el flujo de agua desde
sus tejidos y así el THC pueda ser psicoactivo. Este proceso se denomina secado y dura de una
a cuatro semanas, dependiendo del clima.
2) Curar la hierba: Durante
el curado, se producen reacciones químicas en el cogollo que descomponen la
clorofila (lo que da el color verde a las plantas). Gracias al curado, tu cannabis
tendrá un sabor más suave y no irritará tu garganta. Además tomará mucha más
potencia y le quita el sabor a pasto.
Para secar la
cannabis basta con colgarla en un lugar aireado,
oscuro y seco. Cuando tu hierba en la parte exterior del cogollo tenga un
tacto crujiente y será un buen momento para comenzar el curado. "importante" si la hierba se
seca demasiado, el curado no se realiza correctamente. Normalmente, en dos
semanas la hierba está lista para empezar a curarla aunque en zonas muy secas
puede ser antes y en la costa algo después.
El curado de
la hierba consiste en acabar de secarla muy despacio. Cuando los cogollos están crujientes por fuera, aún tienen algo
de humedad en el interior.
Introduciremos
la hierba en un bote de cristal o una caja de metal o madera tapados. Al otro
día, la humedad interior del cogollo se habrá repartido y ya no estará crujiente.
Para renovar el aire abrimos los recipientes una o dos veces al día durante uno
minutos. Tu hierba se va secando poco a poco mientras la clorofila se
descompone. La hierba al curarse va perdiendo el color verde intenso conforme
pierde la clorofila. El proceso de
curado puede durar de dos a seis semanas, hasta que la marihuana alcanza su
punto de humedad óptimo. Tu hierba estará buena cuando el tallo se quiebre con
un chasquido en lugar de doblarse.
Llegado este
momento hay que envasar el cannabis para que se conserve en buenas condiciones
durante largo tiempo. Si se guarda bien puede durar un año sin perder
demasiado. Incluso más.
Tres son los principales enemigos del
THC: el aire, la luz
y el calor. Por tanto, envasaremos la hierba en botes herméticos y los
mantendremos en un lugar oscuro y fresco, sin grandes variaciones en la
temperatura. Después de muchos meses de cultivo y otros dos meses de secado y
curado, ¡la hierba está lista
para ser consumida!
Para apreciar
al máximo sus cualidades, los cogollos se deben cortar con tijeras. De este
modo no se pierde la resina entre los dedos y el cannabis mantiene intacto todo
su aroma y sabor.
Ud, NO LO HAGA
-No entierres
tu hierba, no tendrá más THC, ni mejor sabor etc... De hecho lo único que
consigues es llenarla de moho, que perjudicará tus pulmones.
-No trate de
cercar la marihuana aplicando calor, No tengas prisa en el secado. Todos los
métodos de secado rápido que usan calor hacen que tu hierba pierda potencia.
¡Si la impaciencia aprieta y no se
puede aguantar!
Secar tu hierba en un horno eléctrico
a la temperatura mínima (en torno a 50º C) y con la puerta entreabierta. Secarla en el microondas, envuelta en papel
de diario la calientas durante unos 10 seg, así el diario absorberá el agua tu
hierba, también puedes secar en el sartén, entre otras. no la pierdas de vista para que
no se queme o seque demasiado